- La ‘masacre de Coimbra’ ha sido denunciada por presuntos delitos de maltrato animal
- En España, la granja comercializa el pollo congelado ‘Cuartos traseros de pollo’ en Mercadona y está certificada con el sello catalán Welfair de bienestar animal
- Los operarios golpearon con varas a centenares de pollos hasta su muerte, los que sobrevivieron presentan graves traumatismos
- La entidad ARDE exige poner fin a las imágenes de animales felices en los envases de productos de origen animal por “no representar la realidad de la industria cárnica”
Coimbra, a 28 de febrero de 2025. La asociación por los derechos de los animales y el medioambiente ARDE publica imágenes sobre una granja avícola certificada en bienestar animal y ubicada en la región portuguesa de Coimbra. En España, la empresa propietaria de la explotación vende la referencia de pollo congelado ‘Cuartos traseros de pollo’ en Mercadona. Las graves irregularidades han sido denunciadas por presuntos delitos de maltrato animal. Destaca que los operarios golpean con varas a centenares de pollos que quedan muertos o con graves traumatismos.
Las imágenes que salen a la luz hoy gracias a la entidad ARDE corresponden a hechos acontecidos a principios de noviembre de 2024 en una granja dedicada al engorde de pollos para carne. La explotación dispone del sello de bienestar animal Welfair, de origen catalán. Está formada por 2 naves, alberga a 41.600 aves y está ubicada en el concejo de Figueira da Foz, perteneciente a la región portuguesa de Coimbra.
Una cámara oculta muestra la carga de aves en el camión para llevar al matadero. El toro mecánico es utilizado de forma imprudente, aplastando a varios pollos. Los operarios dejan a centenares de aves sin cargar. A continuación, se produce lo que ARDE califica como ‘La masacre de Coimbra’ en la que los operarios se deshacen de los pollos restantes. Durante horas, golpean con varas a los animales hasta su muerte. Una de las aves intenta huir, una trabajadora le persigue gritando “¡Cabrão!”.
Esa misma noche, la persona informante documenta el estado de los animales. Los traumatismos por los golpes de los operarios son evidentes: se observan aves decapitadas, otros con los globos oculares o las vísceras fuera. Pollos con alas del revés, completamente dislocadas. Aquellos que han sobrevivido se encuentran en estado semicomatoso, con heridas sangrantes, temblorosos y postrados en el suelo. De acuerdo al testimonio del informante: “Uno de ellos, que nunca podré olvidar, tenía el pico entreabierto, intentaba piar, pero sólo emitía un leve gemido y tenía la cabeza cubierta de sangre”.
La explotación ganadera pertenece a Lusiaves, el productor avícola más importante de Portugal, el cual abastece a establecimientos Mercadona en todo el territorio español. En concreto, es el proveedor de la referencia de pollo congelado ‘Cuartos traseros de pollo’. La granja dispone del certificado de bienestar animal ‘Welfair’. Se trata de un sello independiente que busca garantizar el bienestar de los animales destinados a consumo. En diciembre de 2023, este sello fue foco de críticas tras la denuncia de una explotación porcina ubicada en Burgos. IRTA, la entidad catalana creadora del sello, decidió incluir un 20% de auditorías sorpresa para incrementar su control sobre las granjas certificadas con su sello.
Frente Animal, ONG portuguesa especializada en bienestar avícola, ha denunciado estos hechos ante la Fiscalía de Coimbra, la Guardia Nacional Republicana y la Policía de Seguridad Pública, exigiendo que se investigue el caso y se tomen medidas contra los responsables. Los operarios de la granja avícola podrían estar incurriendo en presuntos delitos de maltrato animal bajo los artículos 387 y 388 del Código Penal portugués. También podrían estar vulnerando la normativa específica sobre ganadería.
Julia Elizalde, portavoz de ARDE, señala: “La masacre de Coimbra es uno de los casos más severos de maltrato animal documentados hasta el momento. Los operarios tratan a los pollos con absoluto desprecio. Pero este no es un caso aislado, la violencia hacia los animales por parte de la industria cárnica es sistemática. Exigimos a los supermercados españoles que dejen de engañar a los consumidores para tapar las vergüenzas de la industria cárnica: eliminen las imágenes de animales felices de sus envases cárnicos y pongan fin al uso de sellos de bienestar animal. El sistema alimentario necesita un cambio de rumbo, demandamos un aumento de la oferta vegetal en beneficio de los animales, nuestra salud y el planeta”.
En Países Bajos, once supermercados, que suman el 90% de las ventas nacionales, se comprometieron a aumentar el porcentaje de sus ventas de proteínas de origen vegetal del 40% actual al 60% en 2030. Cuatro supermercados líderes en Alemania redujeron el precio de los sustitutos vegetales para igualarlo al de la carne. Lidl, declaró que las ventas de productos vegetales aumentaron un 30% tras recortar los precios y colocar la carne vegetal junto a la animal. Ello causa que una cesta vegetal de la compra sea más barata que su equivalente en productos cárnicos.